Muchas personas que ejercitan frecuentemente, no ven problema a ejercitar si están resfriados, pero siempre hemos escuchado que no deberíamos hacerlo.
Si tienes dudas es mejor seguir la regla del cuello.
Quédate con esta idea, si todos tus síntomas están por encima del cuello, puedes seguir con tus entrenamientos. Pero si los síntomas los tienes por debajo del cuello, será mejor que esperes unos días para volver a tus rutinas fitness.
¿Cuáles son los síntomas que indican una cosa o la otra? Muy fácil.
Puedes hacer ejercicio si tienes:
- Congestión nasal
- Dolor de garganta
El ejercicio puede ayudar con síntomas como la congestión nasal, por un corto tiempo y, por lo tanto, puede ser beneficioso.
La actividad física de leve a moderada suele estar bien si tienes un resfriado común y no tienes fiebre. El ejercicio incluso puede ayudarte a sentirte mejor al abrir las fosas nasales y aliviar temporalmente la congestión nasal. Eso no quiere decir que debas hacer ejercicio con un resfriado, sino que si quieres probablemente esté bien.
No puedes hacer ejercicio si tienes:
- Tos
- Falta de aliento
- Dolores musculares
- Congestión torácica
Si tu pecho está congestionado, tienes fiebre, escalofríos, deshidratación o cualquier otra dolencia causada por el resfriado desde el cuello hacia abajo, no hagas ejercicio.
Acude a tu médico para evitar complicaciones.