La fiebre interna es la sensación que la persona tiene de que el cuerpo está muy caliente, a pesar de que el termómetro no demuestra el aumento de la temperatura. En estos casos, la persona puede presentar los mismos síntomas que presenta en el caso de una fiebre real como malestar, escalofríos y sudoración fría, pero el termómetro continúa marcando 36 a 37ºC de temperatura, lo que no indica fiebre.
A pesar de que la persona se queja de que siente el cuerpo muy caliente, en realidad, la fiebre interna no existe, siendo sólo una forma popular de expresar que presenta los mismos síntomas que se experimentan en una fiebre común, pero sin que la elevación de la temperatura se pueda sentir con la palma de la mano, ni se pueda comprobar a través de un termómetro.
Los síntomas asociados a la fiebre interna son:
Sensación de calor por todo el cuerpo, sudoración fría, escalofríos durante todo el día, malestar general, dolor de cabeza, cansancio y falta de energía.
Sin embargo, en el caso de la fiebre interna, aunque todos estos síntomas están presentes, no se puede medir el aumento de la temperatura. Es importante que la persona esté atenta a la duración de los signos y síntomas y a la aparición de otros, ya que puede ser necesario ir al médico para realizar pruebas que permitan identificar la causa de la fiebre y, por lo tanto, comenzar el tratamiento.
Cuando la persona cree que tiene una fiebre interna, debe tomar un baño tibio y acostarse a descansar.
Muchas veces la causa de esta sensación de fiebre es el estrés y las crisis de ansiedad, que también pueden causar temblores en todo el cuerpo; así, en caso de que sea necesario, se debe retirar el exceso de ropa y tomar un baño con agua no tan fría para intentar bajar la temperatura corporal y aliviar el malestar. Se aconseja buscar ayuda médica, cuando además de la sensación de fiebre interna, se presentan otros síntomas tales como: Tos persistente, vómitos, diarrea, rápida elevación de la temperatura por encima de 38ºC y desmayo o disminución de la atención, esto para aclarar mejor el panorama de lo que vive nuestro cuerpo por causa de la fiebre interna.