Lo que escuchará en este material tiene el propósito de compartir información de valor acerca de la pandemia que vivimos actualmente. Hoy conoceremos que se sabe sobre la pérdida de olfato que ocurre en muchas ocasiones en personas con COVID 19; uno de los síntomas más característicos es la anosmia que no es otra cosa más que la pérdida del sentido del olfato, este síntoma además en la mayor parte de los casos se acompaña por la pérdida del sentido del gusto denominada ageusia.
La pérdida del olfato y el gusto se puede presentar en cualquier fase de la enfermedad y aunque no afecta a todos los contagiados su duración puede persistir por semanas y meses como efectos a largo plazo del COVID 19. Se estima que estos síntomas puedan afectar entre el 30 y el 85% de personas que sufren la enfermedad en el mundo.
Las alteraciones del olfato leves o moderadas (del 0 al 7) las conocemos como hiposmia y las graves o totales (del 7 al 10) como anosmia.
Un estudio realizado en Europa publicado en el JOURNAL OF INTERNAL MEDICINE encontró que los pacientes con casos leves de COVID-19, tenían más probabilidades de reportar la pérdida de estos dos sentidos que los pacientes que cursan con cuadros moderados o críticos. En dicho estudio se interrogó a 2581 pacientes diagnosticados con COVID 19 sobre la pérdida de gusto y olfato. De todo el grupo estudiado 2194 casos fueron identificados como casos leves, 110 como moderados y 277 como graves o críticos; los pacientes se clasificaron según la puntuación de la gravedad de la enfermedad COVID-19 de la Organización Mundial de la Salud determinándose como leves a aquellos casos que no tenían evidencia de neumonía viral y que se recuperaron en casa. Los resultados mostraron que el 85,9% de pacientes considerados casos leves perdieron el sentido del olfato en el curso de su enfermedad comparado con solo el 4,5% en los casos moderados y 6,9% en los casos críticos. En cuanto a la duración de la pérdida del olfato, el promedio de recuperación fue de 21 días aunque el 75% lo recuperó a los dos meses y el 95% a los 6 meses. El estudio también muestra que los pacientes jóvenes son los más propensos a sufrir este síntoma que los pacientes mayores.
Respondiendo a la duda del porqué se tienen estos dos síntomas, un estudio reciente de la Facultad de Medicina de Harvard ha demostrado que la clave de la pérdida de olfato y el gusto por la COVID-19 es que el virus SARS-CoV-2 infecta las células nerviosas de la cavidad nasal (células gliales) y no a las neuronas. En el artículo, publicado en la revista Science Advances, se describe que las neuronas sensoriales olfativas no expresan el gen que codifica la proteína del receptor ACE2, que el coronavirus utiliza para entrar en las células. En cambio, sí que se expresa en las células de soporte de las neuronas sensoriales olfativas, las células gliales. Por lo que se puede concluir que el COVID 19 provoca pérdida del olfato y sentido del gusto en los pacientes no por infectar a las neuronas directamente, sino afectando a la función de las células de soporte.
Al momento no se tiene un tratamiento médico para el mismo y se maneja solo la curación espontánea con el tiempo.
El uso de un barbijo, practicar el distanciamiento físico y lavarse las manos frecuentemente son parte importante de la nueva normalidad. Si crees que este contenido es útil, por favor compártelo y comenta tus dudas para resolverlas en los siguientes contenidos.