Evita el riego inadecuado de tus plantas, césped, canteros y jardineras.
Hazlo a primera hora de la mañana, cuando aún no se ha asomado el sol, o por la noche cuando ya se ha ocultado.
Las plantas podrán aprovecharla mejor, y evitarás la evaporación y los efectos de lupa que las gotas de agua producen en las plantas.
Debajo de las macetas coloca platos, para así aprovechar el agua que se drene hacia fuera.